Cibertendencias: ¿Pronto comeremos carne impresa y haremos "streaming" con nuestro cerebro?

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Computer artwork of a brain-shaped network of lines and connections. (Alfred Pasieka/Science Photo Library/Corbis) Source: Alfred Pasieka/Science Photo Library/Corbis

KFC está imprimiendo comida en una máquina 3D, tal como lo hace una empresa de muñecos de acción, pero con comida, mientras que Neuralink permitirá crear una interfaz para nuestra cabeza para retransmitir datos, incluyendo hacer 'streaming' con nuestro cerebro, según nos cuenta Bianca Vaquero.


Dos ciudadanos chinos han sido acusados por fiscales estadounidenses de ser los hackers detrás de una serie de ataques contra compañías de todo el mundo, y de robar información de compañías tecnológicas.

La vacuna del Covid-19 puede estar muy cerca, con varios proyectos ya reportando buenos resultados en las pruebas iniciales; es ahora cuando entra en juego la política del orgullo y el dinero. ¿Qué país será el primero en proteger a sus ciudadanos? ¿Qué empresas privadas serán las que ofrezcan primero semejante protección?

La semana pasada EEUU fue uno de los países que, junto con Canadá y el Reino Unido, apuntó a hackers rusos como los culpables de un intento de robo de posibles vacunas para el Covid-19; parece evidente que hay una guerra cibernética, montada alrededor de esta teórica vacuna, entre las grandes superpotencias.


Puntos destacados:

  • Dos ciudadanos chinos han sido acusados por fiscales estadounidenses de ser los hackers detrás de una serie de ataques contra compañías de todo el mundo, y de robar información de compañías tecnológicas.
  • KFC está imprimiendo comida en una máquina 3D, tal cual lo hace una empresa de muñecos de acción, pero con comida. La compañía que fundó el Coronel Sanders trabaja de la mano con un laboratorio ruso para implementar esta modalidad.
  • Neuralink permitirá crear una interfaz para nuestra cabeza para retransmitir datos, incluyendo hacer 'streaming' con nuestro cerebro.

Este martes el Departamento de Justicia de los EEUU ha acusado a dos ciudadanos chinos de realizar ataques cibernéticos contra una serie de organizaciones estadounidenses y mundiales, según Reuters.

Entre los supuestos objetivos de estos hackers se encontrarían contratistas del Departamento de Defensa e investigadores científicos centrados en encontrar tratamientos y vacunas contra el Covid-19.

Los dos hombres, Li Xiaoyu y Dong Jiazhi habrían organizado una campaña que duró varios años, con el objetivo de robar información secreta de empresas de todo el mundo; entre los datos obtenidos se encontrarían diseños de nuevas armas, información sobre nuevas drogas, o código fuente de programas y aplicaciones.

Los fiscales estadounidenses no han nombrado a ninguna de las empresas supuestamente afectadas por estos ataques; pero sí que han confirmado que la investigación dio inicio cuando un complejo de producción nuclear en el estado de Washington fue hackeado.

La investigación reveló que los mismos atacantes se habían hecho con varios terabytes de datos a partir de ordenadores situados en todo el mundo; además de los EEUU, los países afectados serían el Reino Unido, Alemania, Australia y Bélgica, aunque los fiscales hablan de "cientos y cientos de víctimas en todo el mundo", destacando que este es el grupo de hackers "más prolífico" que han investigado.

La acusación recae directamente en el gobierno chino, ya que los investigadores afirman que Li y Dong actuaron como contratistas del ministerio de seguridad de China; los hackers habrían recibido información del ministerio, incluyendo las vulnerabilidades en el software que podrían usar para hackear sus objetivos.

China ha negado en multitud de ocasiones que pague a hackers independientes como Li y Dong para realizar ataques sobre EEUU y otros países occidentales.
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SBS Spanish Source: SBS Spanish

KFC ESTUDIA IMPRIMIR EL POLLO

Si, KFC está imprimiendo comida en una máquina 3D, tal cual lo hace una empresa de muñecos de acción, pero con comida. La compañía que fundó el Coronel Sanders trabaja de la mano con un laboratorio ruso para implementar esta modalidad.

Este proyecto ambicioso tiene como principal objetivo reducir la cantidad de pollos sacrificados, y además entregar a sus clientes un producto más saludable.


Es extraño de escucharlo. La frase "imprimir comida" te pudiera llevar a pensar que estás ante la presencia de comida plástica. No lo es, pero sí se trata de un alimento artificial. Y es que se trata de una reproducción de carne de pollo, que se basa en una célula del animal de granja.

La empresa con la que trabaja KFC se llama 3D Bioprinting Solutions. El método que se utiliza, según lo publica Daily Mail, es la bioimpresión en 3D. Toma células del ave, cultivadas en un laboratorio, y material vegetal con la intención de reproducir el sabor y la textura del pollo. Al multiplicar estas células se crea la pasta y se imprime en forma de cubo. Más adelante se condimenta y se lleva a los restaurantes. Reseña el portal antes citado que este alimento no es apto para veganos o vegetarianos, pues todavía se utiliza la carne del animal.

En principio lo que se fabricaría serían los Nuggets. Los representantes de KFC manifestaron que dieron toda la receta al laboratorio con el propósito de fabricar el pollo "lo más parecido posible en sabor y apariencia", dijo. "La idea surgió entre los socios en respuesta a la creciente popularidad de un estilo de vida saludable. Además del aumento anual de la demanda de alternativas a la carne tradicional. Y también la necesidad de desarrollar métodos más amigables con el medio ambiente y producción de alimentos", comunicaron.
Infografia violencia doméstica
Source: SBS

EL NEURALINK DE ELON MUSK CADA VEZ MÁS CERCA

Según Elon Musk, su proyecto Neuralink permitirá crear una interfaz para nuestra cabeza para retransmitir datos, incluyendo hacer 'streaming' con nuestro cerebro.

El multimillonario Musk conquista titulares gracias a sus empresas más famosas, como Tesla o SpaceX; pero aunque esas dos se centran en aspectos que cambiarán nuestras futuras vidas (coches eléctricos y viajes espaciales), Neuralink tiene un objetivo que directamente parece salido de una película de ciencia ficción.

El sueño de Musk consiste en conectar cerebros y ordenadores, para que los seres humanos podamos controlar máquinas con la mente, sin necesidad de usar interfaces normales como botones, teclados o pantallas táctiles.

Se espera que el mes que viene Elon Musk organice un gran evento en el que demuestre los avances de Neuralink para conseguir ese futuro. Puede ser revolucionario, especialmente porque esta conexión entre humanos y ordenadores se realizaría con la instalación de chips en el cerebro.

Neuralink ya está desarrollando maquinaria y la tecnología necesaria para implantar estas interfaces electrónicas en el cerebro; una operación peligrosa de necesidad pero que puede suponer el siguiente paso en la evolución humana.

El robot diseñado para la implantación de chips usa 'hilos flexibles' para conectar el chip al cerebro; un simple cable USB-C sería suficiente ancho de banda para hacer streaming de datos al cerebro.

Para generar expectación ante el evento de Neuralink, Musk está adelantando en Twitter algunas de las posibilidades de esta tecnología.

El objetivo de Neuralink es que podamos controlar dispositivos sólo con pensarlo, lo que abriría las puertas a todo un mundo de posibilidades. Por ejemplo, según Musk podríamos escuchar música directamente en el cerebro; los chips se encargarían de 'traducir' lo que nuestro móvil reproduce a señales reconocibles por el cerebro.

Un sistema semejante haría obsoletos a todos los auriculares del mercado. Tendríamos el sonido más puro y directo posible, sin interferencias de ningún tipo. Y eso sólo sería el principio.

Musk añade que este chip incluso podría servir para controlar nuestro propio cuerpo. Por ejemplo, podríamos controlar los niveles hormonales para ayudarnos a tomar decisiones, para mejorar nuestras habilidades o para curar la ansiedad.

Incluso habla de que el chip podría abrir la puerta a una 'simbiosis con una Inteligencia Artificial'; es decir, que la IA pueda vivir en nuestro cuerpo para ayudarnos en nuestro día a día.

Suena prácticamente a pseudociencia, y es por eso que Neuralink tiene mucho trabajo por delante para convencer a sus potenciales clientes para la operación; ante esto, Musk promete que la implantación del chip será similar a la cirugía ocular por láser. Algo nos dice que mucha gente está lista para ponerse en la cola.

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