PUNTOS DESTACADOS:
- El presidente argentino, Javier Milei, suspendió su gira internacional para volver a su país y conformar un comité de Crisis.
- El ministro de Relaciones Exteriores de Chile dijo que su país "condena el uso de la fuerza y defiende el derecho internacional humanitario”.
- El gobierno de Daniel Ortega evitó condenar el ataque de Irán contra Israel.
Tras el ataque con drones por parte de Irán a Israel, varios países latinoamericanos expresaron preocupación por la situación que se vive en Medio Oriente, entre ellos México, Argentina, Chile, Ecuador, Brasil y Venezuela.
La respuesta más llamativa fue la del presidente argentino, Javier Milei, quien suspendió su gira internacional para volver a su país y conformar un comité de Crisis, informó el vocero presidencial, Manuel Adorni, quien compareció junto al embajador israelí, Eyal Sela.
Además, la cancillería ordenó el cierre temporal de las embajadas argentinas en Israel, Irán, Líbano y Siria.
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Argentina alberga la mayor población judía de Latinoamérica y la quinta a nivel mundial, y guarda en su recuerdo dos graves atentados contra intereses de esa comunidad: el perpetrado contra la embajada de Israel en 1992 y el de la Asociación Mutual Israelita Argentina (AMIA) en 1994, que dejaron más de 100 muertos y centenares de heridos.
Pero el embajador israelí en Argentina, Eyal Sela, dijo a un medio local que no ve una amenaza directa en el país suramericano.
Por su parte el ministro de Relaciones Exteriores de Chile, Alberto Van Klaveren, publicó en la red social X que su país "condena el uso de la fuerza y defiende el derecho internacional humanitario”.
Mientras que el presidente de la comunidad chilena en Israel, Gabriel Colodro, detalló sobre lo que se sabe actualmente de los ataques de Irán.
El Gobierno de Uruguay también condenó el uso de la fuerza por parte de Irán y lamentó el agravamiento del conflicto en Medio Oriente. En esta misma línea, las autoridades de Paraguay expresaron su apoyo a Israel y su preocupación por el aumento de la violencia en la región.
En México, el presidente Andrés Manuel López Obrador pidió a Israel no responder a Irán que amenaza con más misiles si ocurre un contraataque israelí.
Brasil también mostró su preocupación ante la situación en Oriente Medio y llamó a evitar una escalada; mientras que Ecuador comunicó que la cancillería se encuentra en contacto con su personal diplomático y siguiendo las instrucciones de seguridad israelí.
Otro de los países que expresó su preocupación fue Venezuela, un aliado de Irán, Rusia y China. El presidente Nicolás Maduro dijo mediante un comunicado que sigue "los preocupantes acontecimientos" en Oriente Medio, aunque evitó condenar el ataque a Israel por parte de Irán.
Nicaragua también es aliado de Irán en Latinoamérica. El gobierno de Daniel Ortega evitó condenar el ataque de Irán contra Israel.
En tanto, Cuba apuntó a la "incapacidad" del Consejo de Seguridad de la ONU tras el ataque al consulado de Irán en Siria, que el Gobierno iraní atribuyó a Israel, como el "catalizador" de la respuesta contra los israelíes, y pidió una “desescalada” del conflicto.
El ministerio de Relaciones Exteriores de la isla considera que la paz en la región "pasa necesariamente por un cese al fuego inmediato y permanente en la Franja de Gaza que ponga fin al genocidio que hoy se comete contra el pueblo palestino".
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