Puntos destacados:
- Nicaragua controlará todo tipo de espectáculos públicos que se realice en su territorio.
- Lester Alemán, joven opositor excarcelado y desterrado en 2023, asegura que se trata de una medida de control total, similar a la de Irán.
- Defensores de los derechos humanos temen una mayor persecución contra los disidentes del gobierno con la reactivación reciente del Ministerio del Interior.
El gobierno de Nicaragua controlará todo tipo de espectáculos públicos que se realice en su territorio, según una normativa publicada en el diario oficial La Gaceta, que alega «seguridad ciudadana», así como «orden interno».
La normativa establece que los productores, promotores y organizadores de actividades, eventos o espectáculos artísticos públicos, deberán solicitar al Ministerio del Interior una constancia o autorización para algún tipo de espectáculo.
Además, deben “abstenerse de intervenir, financiar o promover cuestiones, actividades o temas de política interna y externa o actividades que generen como resultados proselitismo político».
En febrero de 2023, la cantante mexicana Ana Gabriel, durante un concierto en Los Ángeles, Estados Unidos, afirmó que no ha regresado a Nicaragua porque hay una dictadura.
Lester Alemán, joven opositor excarcelado y desterrado en 2023, asegura que se trata de una medida de control total, similar a la de Irán que controla los actos culturales de la población.
En diciembre pasado, el presidente Daniel Ortega relanzó el ministerio del Interior que sustituyó al de Gobernación. Aseguró que será tan fuerte como el que funcionó en el gobierno que encabezó por una década tras el triunfo de la revolución sandinista de 1979, durante el que enfrentó a rebeldes contrarrevolucionarios llamados "contras" que intentaron derrocarlo con patrocinio de Estados Unidos.
Una activista cultural citada por el medio Onda Local, asegura que esta normativa es la "punta del iceberg de toda la lucha mediática por el control sobre el quehacer artístico en Nicaragua. Resalta que el Ministerio del Interior le quita el quehacer al Instituto de Cultura, y que este decidirá qué espectáculos se realizarán y que artistas podrán presentarse en Nicaragua.
Defensores de los derechos humanos temen una mayor persecución contra los disidentes del gobierno con la reactivación reciente del Ministerio del Interior, una entidad que durante la guerra civil funcionó como aparato de inteligencia y espionaje.
Esta medida llega a seis años del inicio de las protestas contra el presidente Daniel Ortega en abril de 2018, las cuales dejaron más de 300 muertos y miles de heridos y exiliados, según cifras de organizaciones de derechos humanos.
Ortega catalogó las manifestaciones como un intento de golpe de Estado contra su gobierno, el cual lleva más de 15 años consecutivos en el poder.
Por su lado, la Policía Nacional mantiene prohibidas las manifestaciones en las calles desde septiembre de 2018 con el argumento de evitar disturbios.
