El número de estudiantes internacionales matriculados en universidades australianas ha venido aumentado en los últimos años.
Cifras publicadas por la Comisión de Comercio e Inversión Australiana indican que en abril de 2018 el número de estudiantes internacionales subió a 548.411, un 12% más que en el mismo período del año anterior.
Es saludable tener estudiantes extranjeros pero la situación se convierte en un problema cuando comienzas a depender de los estudiantes extranjeros para tu supervivencia financiera
Actualmente el 38% de la población total de estudiantes internacionales son chinos, lo que ha causado una elevada dependencia financiera de este grupo entre las universidades australianas.
El mes pasado el Centro de Estudios Independientes (CIS) hizo sonar la alarma sobre la excesiva dependencia australiana de estudiantes chinos con un informe sobre los riesgos financieros para las universidades si el número de estudiantes chinos disminuye repentinamente.
Fuente: Departamento de Educación del Gobierno federal. Source: Department of Education
Es palpitante que estemos dependiendo en gran manera de la contribución de estudiantes internacionales para poder continuar las operaciones cotidianas de las universidades.
El autor del informe, Salvatore Babones, advirtió que el número de estudiantes internacionales, particularmente de la China, es desproporcionadamente alto y pone en riesgo al sector educativo.
"Es saludable tener estudiantes extranjeros pero la situación se convierte en un problema cuando comienzas a depender de los estudiantes extranjeros para tu supervivencia financiera.
“No es fácil retirar las inversiones que han hecho (las universidades) en infraestructura, equipos y personal académico, si los estudiantes internacionales se van repentinamente”, afirmaba Babones.
El informe analiza la situación de siete universidades australianas que tienen una fuerte dependencia de los estudiantes extranjeros de China para su supervivencia financiera; las universidades de Melbourne, Sídney, Adelaida y Queensland y la Universidad Nacional Australiana (ANU), la Universidad de NSW y University of Technology Sydney.
Lo que hemos visto en los últimos veinte años es que China ha venido superando sus niveles de educación y la preparación de sus estudiantes, y este cambio está reduciendo su necesidad de enviar estudiantes fuera del país.
Se descubrió que estas siete universidades dependen en gran medida de los estudiantes chinos para sus ingresos y que cada una de ellas tiene más estudiantes internacionales que las universidades en Estados Unidos.
El profesor Babones opina que si el número de estudiantes chinos se reduce el riesgo para las universidades australianas es significativo.
“Se está desarrollando una guerra comercial en este momento entre Estados Unidos y China que está ejerciendo fuerte presión sobre la economía y moneda china, una situación que podría afectar a las universidades australianas si los estudiantes abandonan el país repentinamente,” explicaba el académico.
Las siete universidades identificadas en el informe dijeron a SBS News que los estudiantes internacionales chinos han hecho valiosas contribuciones a sus instituciones y a Australia, pero algunas reconocieron que se necesita más diversificación.
El director y consejero principal del departamento de planeación e investigación de la Universidad RMIT en Melbourne, Ángel Calderón, opina que la dependencia de las universidades australianas con respecto a China en materia de estudiantes es motivo de preocupación.
Calderón y un grupo de académicos de RMIT están realizando un estudio sobre la situación financiera de 18 instituciones de educación superior en Queensland, NSW y Victoria, y los hallazgos señalan conclusiones similares a las del Centro de Estudios Independientes.
Source: AAP
“Es palpitante que estamos dependiendo en gran manera de la contribución de estudiantes internacionales para poder continuar las operaciones cotidianas de las universidades”, señaló Calderón.
El grupo de académicos de RMIT ha encontrado que el 25% de las universidades australianas dependen de los estudiantes internacionales que provienen de mercados centrales como China y en menor medida India.
Pero con las actuales tensiones geopolíticas existe la posibilidad de que se cierre o se reduzca el número de estudiantes que China envía a Australia.
Según Calderón, el gigante asiático ha estado mejorando la calidad de enseñanza en sus propias instituciones educativas, aumentando la competencia y riesgos financieros para las universidades australianas.
“Lo que hemos visto en los últimos veinte años es que China ha venido superando sus niveles de educación y la preparación de sus estudiantes, y este cambio está reduciendo su necesidad de enviar estudiantes fuera del país”, advirtió el académico de RMIT.
La entrevista completa con el académico Ángel Calderón la puedes escuchar en el podcast al principio de esta página.
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