Un nuevo estudio llevado a cabo por el Alfred Deakin Institute for Citizenship and Globalization demuestra que las víctimas de delitos de odio en Australia, no reportan su experiencia a su entorno o a los agentes sociales. La investigación se ha llevado a cabo ya que según expertos sociales se sabe "muy poco" de este tipo de incidentes en nuestro país.
El informe destaca que únicamente el 38% de las víctimas de este tipo de incidentes, denunciarán a la policía. Este dato, pone en relieve que hay barreras que impiden a los "más vulnerables" desahogarse ante una situación de estrés y malestar.
Muchas formas de violencia tienen su origen en que los grupos predominantes de la sociedad, manifiestan sentimientos de rechazo y discriminan a grupos específicos como inmigrantes, minorías étnicas o personas con discapacidad.
Puntos destacados:
- Un estudio revela que únicamente el 38% de los más "vulnerables" denuncia haber sido víctima de delitos de odio.
- Los encuestados saben que deben denunciar injusticias, pero no lo acaban haciendo por diversas razones.
- Investigadores piden mayor formación y entrenamiento entre los agentes sociales.
La Doctora Carolina Navarro, miembro del Alfred Deakin Institute y profesora en la Universidad de Chile es co-autora del informe. La investigadora destaca que aunque las personas más vulnerables en Victoria tienen conciencia de que cuando sufren situación de odio, deben denunciarlo, cuando se les pregunta por situaciones personales "los datos son preocupantes".
La investigadora defiende el papel de gran importancia de los agentes sociales y pide mayor formación y cohesión en las ideas.
"En las directivas de los agentes se tiene una gran conciencia y deseo de mejora, pero hay mucho que hacer en los agentes de 'primera línea'. Hay dificultades operativas y en las definiciones de los delitos. Australia necesita entrenar a las fuerzas policiales y a los agentes, ya que cumplen un papel importante".
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