La actividad física y mantener una dieta equilibrada son dos cosas que todos podemos hacer a diario para mantener una buena salud, afirma la profesora de Actividad Física y Salud, Anne Tiedemann.
Otras personas incluyen limitar su consumo de alcohol, dejar de fumar y mantenerse conectado socialmente.
1. Actividad física
La profesora Tiedemann señala que hay bastante evidencia de que la actividad física promueve no solo la salud física, mental y social, sino que también previene la aparición de enfermedades en la vejez.
Lo que una persona hace hoy o esta semana puede ser beneficioso para su futuro, explica la experta de la Universidad de Sídney.
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Respecto a la cantidad de actividad física que un persona debe realizar, la profesora Tiedemann sugiere consultar , que brindan recomendaciones según la edad y si una persona tiene una enfermedad crónica o una discapacidad.
“El mensaje principal de la actividad física es que es buena para todos, sin importar la edad o el nivel de discapacidad que tengamos.
"E incluso si no se puede cumplir con la cantidad de actividad física que se recomienda en las pautas, también sabemos por investigaciones muy claras que cualquier cantidad de ejercicio o actividad física es beneficiosa y que hacer un poco más de lo que la persona hace actualmente traerá beneficios para su salud".
La investigadora explica que la actividad física puede presentarse de diferentes formas y no tiene que ser un deporte estructurado o un grupo de ejercicios.
“Puede ser tu tiempo de ocio, salir a caminar, o pueden ser tus tareas domésticas, como hacer actividades en la casa, jardinería, todas esas cosas están promoviendo la salud”.
2. Mantener una dieta equilibrada
La profesora Tiedemann asegura que es importante mantener una dieta equilibrada para reducir los factores de riesgo de enfermedades a largo plazo y reducir el riesgo de obesidad.
Incluir alimentos nutritivos en la dieta es bueno para alimentar tu cuerpo, mantener los huesos fuertes y sentirse con energía.
“Todas esas cosas son realmente importantes: comer una dieta balanceada, no demasiada comida procesada ni demasiada azúcar, que es un gran problema en la sociedad ahora”.
La proporciona información sobre los tipos y cantidades de alimentos, grupos de alimentos y patrones dietéticos.
Esta guía alienta a los australianos a disfrutar de una amplia variedad de comida nutritiva donde se incluyan elementos de los cinco grupos de alimentos, al tiempo que limita la ingesta de alimentos que contienen grasas saturadas, sal agregada, azúcares agregados y alcohol.
3. Limitar el consumo de alcohol y dejar de fumar
"Sabemos que esos son factores de riesgo del estilo de vida realmente significativos para muchas enfermedades", afirma la profesora Tiedemann, con respecto a la necesidad de limitar el alcohol y dejar de fumar.
El consumo de alcohol contribuye a 3 millones de muertes cada año en todo el mundo, así como a las discapacidades y la mala salud de millones de personas, según la Organización Mundial de la Salud.
Los datos del Instituto Australiano de Salud y Bienestar (AIHW, siglas en inglés) muestran que en 2020 se registraron 1.452 muertes inducidas por el alcohol, la mayoría (73 por ciento) fueron hombres.
La , revisada en 2020, establece pautas de consumo para reducir los riesgos para la salud derivados de la ingesta de alcohol.
Además, la organización Cancer Council comparte , donde incluye la incorporación de días sin alcohol y el uso de agua para saciar la sed.
4. Mantenerse conectado socialmente
La profesora Tiedemann hace énfasis en que la soledad es un "gran problema" en la sociedad, y eso puede suceder incluso cuando una persona está rodeada de otras, ya que a menudo hay una "falta de conexión".
“Se trata de sentirse conectado con quienes te rodean y sentirte conectado con la sociedad en la que vivimos.
“Todo se reduce a sentir que significas algo para otras personas y también a demostrar que te preocupas por otras personas. Toda esa conexión humana es realmente importante”.
Ella dice que la conexión se puede lograr de varias maneras, incluso como voluntario y siendo activo en la comunidad.
“[El voluntariado] puede ser una forma de promover la conexión social con otras personas. Ser parte de un grupo y tener una especie de propósito combinado puede ser una opción, por lo que muchas personas encuentran que el deporte es realmente bueno para eso.
“Tienes un deporte basado en el equipo, todos buscan el mismo tipo de resultado y están conectados de esa manera”.
Sin embargo, la especialista explica que algunas personas disfrutan estar solas.
“Incluso si [estos individuos] están solos, todavía tienen esa conexión a través de otros medios”.
La organización Beyond Blue recomienda utilizando la tecnología. Herramientas como Skype, Zoom, FaceTime y aplicaciones como House Party, permiten que las personas se conecten en grupos a través de video-reuniones.
La organización también recomienda programar reuniones sociales regulares, como por ejemplo un club de lectura, una noche de trivia, cenas familiares, fiestas de baile o simplemente charlas nocturnas con amigos.
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5. Estar al pendiente de la salud propia y de la de los seres queridos
Los confinamientos durante la pandemia de COVID-19 fueron un buen ejemplo de por qué es necesario cuidar de uno mismo y de las personas que te importan, puntualiza la profesora Tiedemann.
“Creo que eso es realmente importante. Sé que yo misma, por ejemplo, me preocuparía por los padres mayores que están encerrados o por asegurarme de que tengan lo que necesitan.
“Pero a menudo no te das cuenta de que estás cargando con mucho estrés y ansiedad. Por lo tanto, es realmente importante autoevaluarse y asegurarse de que se están haciendo cosas que son buenas para tu propio bienestar”.
para que la persona verifique semanalmente cómo se encuentra su salud mental, incluidos sus sentimientos, cuerpo, sueño y pensamientos.
Si tú o alguna persona que conoces necesita ayuda pueden comunicarse con Lifeline al 13 11 14, esta es una línea 24/7 para momentos de crisis. También se puede solicitar apoyo a Suicide Call Back Service al 1300 659 467 o a Kids Helpline al 1800 55 1800 (para niños y jóvenes de 5 a 25 años). Hay más información disponible en los portales de y .
También puedes encontrar información en , un apoyo para las personas de orígenes cultural y lingüísticamente diversos.
