Esta historia contiene referencias a agresiones sexuales
Hace un puñado de años, Chanel Contos era alumna de Kambala, una escuela sólo para chicas en Sidney. La escuela estaba llena de chicas y mujeres fuertes, y fomentaba el pensamiento feminista.
Era en las noches de los sábados cuando las cosas se torcían.
"Era nuestra única exposición al sexo opuesto y crecí socializada de una manera que me hacía entender a los chicos sólo como seres sexuales", explica Contos, de 23 años, a The Feed desde Londres.
Esta es una de las razones por las que la activista, que tiene un máster en educación de género y desarrollo internacional, desearía que Australia se alejara de las instituciones de un solo sexo.
"Mantiene los estereotipos y las expectativas de género", afirma Channel Contos. "Es la única situación en la que estamos segregados por sexo de esa manera".
Según The Good Schools Guide, en Sídney hay 26 institutos sólo para chicos, 26 sólo para chicas y 213 mixtos. En Melbourne, son 13, 24 y 206 respectivamente.
A principios de este año, Contos hizo un llamamiento en las redes sociales preguntando a los usuarios si ellos o alguien cercano había sido agredido sexualmente cuando estaba en la escuela. En 24 horas, recibió más de 200 testimonios. Ahora, esa cifra supera los 6.700. Muchas denuncias se hicieron contra hombres que asistieron a escuelas privadas de élite para varones.
Estos testimonios se unen a una larga lista de relatos perturbadores que han salido a la luz a través de informes de los medios de comunicación, incluyendo escalofriantes listas asquerosas de las escuelas de niños y niñas que contienen "desafíos" sexuales.
Otras denuncias aludían a los estudiantes de la escuela privada de varones de Melbourne St Kevin's. Se trataban de imágenes de 2019 que mostraban a los chicos de esta escuela con uniforme escolar en un tranvía gritando un cántico que incluía la frase: "'Ojalá todas las mujeres fueran agujeros en la carretera".
La directora de St Kevin's, la señora Deborah Barker, dijo a The Feed que "hemos involucrado a toda la comunidad escolar en una travesía transparente de renovación cultural y educativa" en los últimos 12 meses.
Barker asumió el cargo a principios de este año y es la primera mujer directora de la escuela desde su fundación en 1918. Dijo que la escuela había hecho cambios significativos para mejorar su "programa de educación para las relaciones respetuosas" en su plan de estudios.
"Revisamos constantemente todos los aspectos de nuestra oferta para asegurarnos de que el respeto está en el centro de lo que enseñamos", dijoBarker.
"El mal juicio de algunos ha defraudado al Colegio, sin embargo, la inmensa mayoría de nuestros chicos son individuos extremadamente cariñosos, responsables y respetuosos a los que estoy absolutamente orgullosa de dirigir..."
¿Es un modelo mejor para fomentar las relaciones sanas y respetuosas?
Para algunos alumnos, los colegios de un solo sexo son la mejor opción académica, dice Chris Hickey, profesor de educación de la Universidad de Deakin que ha trabajado con colegios exclusivamente masculinos en cuestiones relacionadas con la igualdad de género.
"No creo que sean intrínsecamente malos, pero creo que pueden serlo si se deja que se convierta en algo tóxico", dijo el profesor Hickey.
"St Kevin's es un ejemplo en el que se toleraron comportamientos y cánticos de tipo blokey sin control. Se convirtió en parte de la subcultura, no de la cultura oficial, pero sí de una subcultura de conquista sexual".
Stephen F. Russell, el director de St. Kevin's en aquella época, se disculpó cuando salieron a la luz las imágenes del cántico.
"Como marido, padre de hijas, hermano de cuatro hermanas, hijo y, espero, buen amigo y colega decente de muchas mujeres, sé que este comportamiento no puede quedar sin respuesta", dijo.
Russell también calificó el cántico de "ofensivo y misógino" en una declaración a los medios de comunicación.
Según el profesor Hickey, se puede trabajar activamente contra la vulnerabilidad de los colegios de chicos a la cultura hipermasculina y colaborar con los colegios de chicas.
Y aunque probablemente sea más difícil en un entorno de un solo sexo, no es algo que no pueda solucionarse, dijo.
"Cuando estamos hablando de dos personas que consienten, tener la conversación sin una de las muestras representativas en eso, sí lo hace problemático""Si no hay una voz femenina, en su planteamiento... me preocuparía".
Contos dijo que formar el respeto mutuo a través de una amistad genuina en los años de formación de los niños y las niñas ayudaría a eliminar los prejuicios y las expectativas de cada género.
"Creo que la exposición del sexo opuesto desde una edad temprana es una de las mejores cosas que podemos hacer para eliminar la cultura de la violación", dijo Contos, al añadir que "nos vemos como amigos y no como simples objetos sexuales, y eso va en ambos sentidos".
La profesora Hickey también añade que la escuela no es el único lugar donde se puede hacer ese trabajo.
"Los padres y las escuelas tienen que encontrar la manera de introducir las voces del sexo opuesto de forma respetuosa... y sólo porque haya mujeres en el aula, no hay que dar por sentado que todo se aborda de forma eficaz".
Las investigaciones indican que en este tipo de escuelas puede fomentarse un sentimiento de derecho, pero el profesor Hickey dijo que su estrecho trabajo con las escuelas sólo para chicos muestra que las instituciones que se comprometen frecuentemente con prácticas para fomentar una cultura respetuosa e incluir al sexo opuesto en las conversaciones sobre el consentimiento ven resultados.
Uno de los colegios masculinos que está considerando el cambio a la enseñanza mixta es el Cranbrook School de Sydney.
Tiene previsto introducir a las chicas en los cursos 11 y 12, y la comunidad escolar será consultada sobre la propuesta a principios del año que viene.
En una carta dirigida a los padres, el presidente del consejo escolar, Jon North, dijo que el consejo creía que la medida fomentaría unas relaciones sanas y respetuosas entre los sexos.
"Durante los últimos doce meses, el Consejo Escolar y el Director han estado explorando opciones de coeducación que aumentarían la interacción entre niños y niñas, fomentarían el desarrollo de relaciones sanas y respetuosas y proporcionarían una sólida base académica y pastoral para el éxito continuo de la escuela", decía parte de la carta de North.
North dijo a los padres que el consejo había examinado la investigación sobre la coeducación y analizado los estudios de casos de otras escuelas.
Chanel Contos. Source: Instagram
Los números cuentan una historia diferente
La profesora Mary Louise Rasmussen -experta en género, sexualidad y educación de la Universidad Nacional de Australia- dijo a Feed que, aunque los informes se han centrado principalmente en los colegios de élite exclusivamente masculinos, las cifras cuentan una historia diferente.
"Si pensamos en el número de mujeres de nuestra comunidad, una de cada tres, que ha sufrido alguna forma de violencia o acoso en su vida, eso nos demuestra que no se limita a ningún sector en particular. Es imposible que sólo ocurra en esas escuelas".
El profesor Rasmussen dijo que la cobertura de las escuelas de élite en los últimos meses podría deberse "a lo organizados que están los jóvenes", lo que hace que cosas como una lista de retos del día de la basura sean más susceptibles de ser filtradas.
"Puede que tengan la capacidad financiera para hacerlo de forma más sistematizada", dijo el profesor Rasmussen.
A pesar de la popularidad de las escuelas independientes de un solo sexo, el profesor Rasmussen dijo que la tendencia se estaba alejando de la educación de un solo sexo, lo que llevó a algunos investigadores a predecir el fin completo de las escuelas de un solo sexo para 2035.
"Lo que estamos viendo con el tiempo es que las propias escuelas y los padres se están alejando de las escuelas masculinas de un solo sexo", dijo el profesor Rasmussen.
"Me parece que si las personas que son consumidoras de esas escuelas, y las personas que las dirigen, se están alejando poco a poco de esos modelos, desde dentro, mucha gente se está cuestionando lo buenos que son".
Si usted o alguien que conoce se ve afectado por la violencia familiar y doméstica o las agresiones sexuales, llame al 1800RESPECT al 1800 737 732 o visite 1800RESPECT.org.au.
